viernes, 18 de marzo de 2016

Cerrar puertas, abrir puertas, nunca cerrar ninguna puerta


Hace 1 año tenía claro mis prioridades pero me dije a mí mismo que una vez pasado ese tiempo habría que hacer una reflexión de lo vivido en la búsqueda de nuevas experiencias profesionales. Después de pasado ese tiempo he sido fiel a lo que dije, he realizado ese análisis y la conclusión es muy clara. No puedo negar lo que el mercado ofrece por mucho que yo haya priorizado unas
opciones sobre otras. Me dije que en el primer año mi prioridad sería encontrar un trabajo por cuenta ajena relacionado con la informática orientada a aplicaciones de gestión y/o trabajos administrativos más directamente relacionados con la contabilidad, fiscalidad, nóminas, etc. Al ser posible quería algo mixto que me permitiría ayudar en agilizar y mejorar los sistemas de gestión de la empresa en cuestión en la que podría ser contratado. Lo sigo queriendo y creo que es dónde más puedo aportar.




No puedo negar que he recibido una cantidad considerable de ofertas para cómo está el mercado. A pesar de no cerrar definitivamente mi anterior etapa profesional hasta Septiembre ya llevo un tiempo sondeando el mercado. Pero por unas u otras razones ninguna oferta se ha concretado en algo definitivo. En algunos casos porque aunque para mí eran muy apetecibles no he sido finalmente seleccionado y otras muchas porque eran descartadas por mí al ser ofertas muy lejanas respecto a dónde yo vivo. Los que me conocéis ya sabéis que descarto un cambio de residencia habitual por mi situación personal. En éste tiempo he aprovechado mucho el tiempo para acumular más de 1.000 horas de formación en distintos ámbitos de la gestión de las empresas. Casi al 50% entre formación orientada a temas administrativos y otro 50% más orientado a temas informáticos relacionados con la gestión de las empresas. He tenido la suerte de conocer por el camino a mucha gente interesante que me ha aportado mucho.




Y mientras pasaba el año me han sugerido en varias ocasiones si no contemplaba la opción de trabajar por mi cuenta siendo autónomo o freelance. Algunos directivos o dueños de pequeñas empresas me decían que quizás sería más fácil buscar varios clientes a los que ofrecer mis servicios que centrarlo todo en uno. Estas mismas personas me comentaban que para ellos era implanteable contratar a alguien como yo full-time pero que para ayudar puntualmente en ciertos trabajos o proyectos sería mucho más factible plantearse esa posibilidad. Otros me decían que trabajar periódicamente para ellos unas horas a la semana podría ser una opción mucho más factible de encajar en sus estructuras. En ésta línea me están ofreciendo pequeños trabajos o colaboraciones de mayor calado que exigen realizar el trabajo siendo freelance. Y como he dicho al principio no soy nadie para contradecir al mercado y abro definitivamente la puerta cerrada hace un año. Sigo con otras posibilidades abiertas pero no descarto algo que por lo que parece es más acorde a mi perfil según está hoy en día el mercado laboral.



Realmente voy a seguir ofreciendo exactamente lo mismo pero en vez de ofrecer todo mí tiempo a una misma empresa voy a intentar repartir mis servicios en varias empresas a las que pueda aportar valor con mi trabajo. Aquí podéis ver y descargar unos mapas visuales en los que se ven los servicios que puedo ofrecer a las empresas para ayudarles a mejorar la gestión diaria de su negocio.

La moraleja es clara, es mejor abrir todas las puertas desde el principio y no cerrar ninguna. Si lee esto mi profesor de Marketing Aitor Ubarretxena de la agencia de comunicación Infotres me dirá, “Te lo dije”. Aitor, tenías razón y no dudo en reconocértelo.


Asier Oñativia

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