Hoy voy a hacer una reflexión sobre las experiencias que me están transmitiendo casos de éxito en distintas jornadas a las que he acudido.
Aunque lógicamente lo que voy a escribir tiene que ver con la tecnología creo que el quid de la cuestión es más la propia cultura de empresa que de la propia tecnología. En un mercado global tan complicado y convulso los casos
que más éxito están teniendo en mis círculos cercanos son empresas que están continuamente reinventándose y buscando nuevos modelos de negocio dentro de su sector o actividad. Muchos de ellos cuando les va bien no se acomodan y miran más allá aunque teóricamente tienen una cartera de pedidos y de clientes consolidada que en principio les asegura su continuidad e incluso un crecimiento. Con las continúas compras, fusiones, y cierres de empresa que se producen continuamente en todos los sectores esa tranquilidad puede truncarse drásticamente en cualquier momento. Aquí en Gipuzkoa donde yo vivo las empresas que más están creciendo han variado drásticamente su ratio de ventas pasando de un mayoritario mercado nacional a vender fuera la gran mayoría de sus productos. Para hacer esto muchas han tenido que reinventarse.
que más éxito están teniendo en mis círculos cercanos son empresas que están continuamente reinventándose y buscando nuevos modelos de negocio dentro de su sector o actividad. Muchos de ellos cuando les va bien no se acomodan y miran más allá aunque teóricamente tienen una cartera de pedidos y de clientes consolidada que en principio les asegura su continuidad e incluso un crecimiento. Con las continúas compras, fusiones, y cierres de empresa que se producen continuamente en todos los sectores esa tranquilidad puede truncarse drásticamente en cualquier momento. Aquí en Gipuzkoa donde yo vivo las empresas que más están creciendo han variado drásticamente su ratio de ventas pasando de un mayoritario mercado nacional a vender fuera la gran mayoría de sus productos. Para hacer esto muchas han tenido que reinventarse.
Han tenido que mostrarse fuera, tanto físicamente con redes comerciales como a través de Internet que nos abre a todos a todo el mundo. Conozco casos espectaculares de empresas que ahora van subiendo su ventas on-line de manera increíble gracias a que han innovado muchísimo tiempo creando autenticas maravillas en su web. Por poner un ejemplo vi hace poco un producto industrial cuyo objetivo ya conseguido en gran parte era que dentro de miles de productos que tenían en su stock cada cliente podría configurar cualquier nuevo producto con una serie de parametrizaciones que les iba pidiendo su aplicación web. No solamente creaban un producto nuevo ellos mismos, si no que les iba a salir el precio de venta final al instante. Obviamente había un trabajo de años para conseguir esto, un control exhaustivo de los costes para poder ofrecer esta opción a sus clientes. Y ese producto en cuánto se confirmara la venta iba a pasar al departamento de diseño para que en unos días estuviera en el taller de producción para salir lo antes posible hacia el cliente. Con este ejemplo quiero mostrar que las posibilidades son múltiples en cada empresa pero se necesita mucho trabajo de base y una cultura interna de continua innovación para conseguir estas maravillas.
Y lo mismo para nuevas oportunidades de negocio. Siempre puede haber negocios relacionados con nuestra actividad que nos puedan permitir ampliar nuestro catalogo de productos y nuestra cartera de clientes. Y aquí sí que la creación de estos nuevos modelos de negocio es casi imprescindible que estén apoyados o basados en la 2.0.
Por lo tanto se acabó la cultura de la comodidad en nuestro trabajo o en nuestras empresas. Nunca hay que parar de pensar e idear nuevas propuestas para reinventarse y así tener más posibilidades de sobrevivir o incluso crecer. Esto mismo lo podemos aplicar a cada uno de nosotros personalmente.
Asier Oñativia
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